“Jefe, no llegamos al color especial”

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Cuántas veces hemos escuchado esta fatídica frase de parte de un operario de prensa?

Y la pregunta que sigue, “Levanto el trabajo?”

Estas frases desatan una cadena de consultas, idas y vueltas para encontrar al responsable del ‘error’. 

A saber:

El Jefe pregunta qué hacer al Gerente de Producción. El Gerente de Producción, al ver quién es el cliente y la envergadura del pedido, pregunta al Gerente Comercial. El Gerente Comercial pone el grito en el cielo con las siguientes frases: “Justo con este cliente!!”, “Lo vamos a perder definitivamente!!”, “Ya tuvimos esta situación antes!!” y otros comentarios por el estilo.

El Gerente de Producción, en vista de las horas insumidas en el arreglo del trabajo más la cantidad de metros de material tirados a la basura para tratar de igualar el color deseado, apela ante el Gerente General quien llama al Gerente Comercial para, los tres juntos, evaluar todos los riesgos de entregar un color ‘casi igual’ a un cliente exigente, cuánto debe este cliente, sus compras anuales, etc. Y generalmente dice : “Levanten el trabajo…

Ya tranquilos con su conciencia, el Gerente Comercial y el de Producción bajan a sus oficinas. De paso por la oficina de Compras, el Gerente de Producción dice, “Compraron cualquier cosa muchachos”, lo que inmediatamente desencadena el proceso de reclamo al proveedor de tintas.

Hasta aquí, parece que el único ‘daño’ visible se reflejará en los costos extras de horas de arreglo y el material insumido, los que probablemente se compensen en el mes con eficiencias en otros trabajos. Pero hay un costo invisible. Un costo que no genera valor alguno.

Les propongo realizar el siguiente cálculo:

Les aseguro que se van a sorprender con el resultado de esta sumatoria!!

¿Qué información necesita el proveedor de tinta para formular un color especial?

Consulté con profesionales de Flint Group, quienes me mencionaron algunos aspectos a tomar en cuenta antes de comenzar a hablar sobre el color.  Aquí siguen los aspectos:

1. En qué soporte se va a imprimir el color? ( estamos hablando de etiquetas autoadhesivas en este caso)

  • Papel Ilustración
  • Papel obra (o Bond)
  • BOPP transparente
  • BOPP blanco
  • PET y/u otros plásticos

2. Estamos suponiendo un sistema de impresión flexográfico utilizando qué tipos de tinta?

  • Tintas base agua con sistema de secado con aire caliente(Temperatura y caudal de aire)
  • Tintas UV con sistema de curado ultravioleta(lámparas de mercurio o LED, potencia mínima y máxima de las lámparas, velocidad de operación / dosaje)
  • Tintas base solvente (raro en el segmento de etiquetas autoadhesivas)

3. Condiciones de aplicación de la
tinta.

  • Cilindros anilox a utilizar (suponemos cerámicos) aclarando ángulo de grabado, lineatura y volumen de celdas.
  • Velocidad de operación esperada
 

4. Condiciones de resistencia especificas con que debe contar la tinta.

  • Resistencia a la temperatura
  • Resistencia a la corrosión
  • Resistencia a la luz
  • Otras condiciones especificas

5. Acabados en línea o fuera de línea

  • Barnices (decurado UV o base agua )
  • Laminados
Por qué es importante tener en cuenta estos aspectos?

Porque lo que el impresor va a querer lograr con este color especial es que el mismo se ajuste a su estándar de color una vez aplicado y con el producto “envase, etiqueta, etc” finalmente terminado.

Por tanto es claro que este color especial estará influenciado por el entorno.

 Ahora entramos específicamente a hablar de los colores especiales propiamente dichos.

Uno de los errores más comunes que se presentan en la definición del color especial está asociado a la identificación del color vs un punto de referencia; por ejemplo un color del catálogo Pantone, dicho catálogo es enorme,  vienen impresos en papel ilustración con brillo (glossy) y  sin brillo (mate).Este catálogo fue impreso de una manera y en condiciones determinadas que pueden o no ajustarse a nuestra realidad.

Es importante definir dicha realidad. Es imperativo realizar un Fingerprint en nuestra máquina para saber por un lado qué aporte de tinta real tiene cada uno de nuestros anilox y qué ganancia de punto obtenemos en la impresión con respecto al punto grabado en el polímero.  

Por otro lado es deseable manejarse con coordenadas de color (vía espectrofotómetro) L.a.b. y definir un margen de tolerancia aceptable medido de acuerdo a algún Delta E.
Conclusión: 
Cuanto más acotemos las diferentes variables descriptas menores serán los desvíos en el logro del color acotando al máximo los desperdicios de material y tiempo en maquina. 

Cómo se produce la transferencia de tinta desde su bandeja al sustrato en la impresión flexográfica?

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Como primera medida tenemos que identificar los elementos que intervienen en el proceso de transferencia:

  1. Bandeja con tinta
  2. Cilindro anilox
  3. Cilindro portapolímero (o portacliché)
  4. Sustrato a imprimir

Mirando el video tendemos a imaginar que la tinta va desde su bandeja al sustrato por simple contacto con el anilox que, al girar, transfiere la misma al polímero por su fuerza centrífuga, y el polímero transfiere la tinta al papel por capilaridad.

Esto en parte es así. No obstante, tenemos que recordar algunos conceptos sobre tensión superficial de un líquido para completar el concepto.

Antes de empezar, les presento a nuestra amiga/enemiga en el proceso: la gota.

La gota está conformada por moléculas (recuerdan? Átomo/neutrones/protones/electrones/órbitas, etc.?). Estas moléculas se atraen entre sí y hacia el centro de la gota dándole su forma característica: Redonda.

Una vez conformadas, las gotas se juntan y declaman: Contraernos? NUNCA!! Expandirnos? JAMÁS!!

Además, cuando se reúnen formando un líquido, generan la energía (superficial) que posibilitó la famosa foto del mosquito “parado” sobre el agua.     

La tensión superficial hace referencia a la cantidad de energía que se requiere para incrementar la superficie de un líquido (nuestra gota) por unidad de área. Dicha energía es necesaria, ya que los líquidos ejercen una resistencia a la hora de incrementar su superficie.

Dicha tensión superficial se mide en dinas/cm y tenemos que mantenerla bajo control porque cuando la gota llegue al sustrato, puede que no lo “moje” de la manera adecuada a fin de lograr una buena impresión.
La energía superficial de la hoja no logra “romper” la tensión superficial de la gota. Por tanto, la superficie de “mojado” es muy pequeña.

En nuestro proceso de transferencia de tinta desde su bandeja hacia el sustrato, debemos respetar una determinada “escalera” de tensiones superficiales, donde la tinta constituye el peldaño inferior. Resumiendo:

  •          Tensión superficial de la tinta  < tensión superficial del anilox
  •          Tensión superficial del anilox   < tensión superficial del polímero
  •          Tensión superficial del polímero   < tensión superficial del sustrato

(Nota: utilizamos el término “tensión superficial” en todos los casos para facilitar la comprensión. El concepto de tensión superficial en los líquidos es equivalente al de “energía superficial” cuando nos referimos a los sólidos) 

Sigue una tabla de valores promedio de las tensiones superficiales de cada componente:

  •         Tinta                                Entre 23 y 42 dinas/cm
  •          Anilox                             Entre 33 y 55 dinas/cm
  •          Polímero                       Entre 35 y 41 dinas/cm
  •          Sustrato (papel)        Entre 40 y 45 dinas/cm

Como ven, la tinta presenta el menor valor dentro de la serie.

Lo que realmente está pasando es lo siguiente:

  1. El anilox “atrae” la tinta del tintero y la aloja en sus celdas.
  2. El polímero “atrae” la tinta de las celdas alojadas en el anilox.
  3. El sustrato “atrae” la tinta del polímero. 
Por qué es importante comentar este concepto de tensión superficial?

La tinta (en el ejemplo: base agua) está compuesta por pigmentos, resinas, aditivos y un solvente – en este caso es agua- y debe presentar la menor tensión superficial de todo el conjunto.

La proporción de agua dentro de una tinta base agua es significativa. Si nosotros “manipulamos” la tinta para lograr un tono- normalmente para aclararlo- solemos agregar agua como diluyente. Es muy probable que estemos afectando la tensión superficial de la tinta, dado que el componente agua tiene la tensión superficial más alta dentro de la mezcla, y, como dijimos, su proporción es significativa dentro de dicha mezcla.

Corremos el riesgo de que la nueva tensión superficial de esta tinta “manipulada” sea igual o mayor a la tensión superficial del anilox haciendo que la transferencia sea muy defectuosa, si no, imposible.

 Recomendación:

Siempre consulte e involucre a su proveedor de tintas no sólo con respecto al tipo de tinta adecuada en función al sustrato que vamos a imprimir, batería de anilox disponibles, velocidad de impresión, tipo de secado, etc., sino también sobre la posibilidad de manejo o modificación que podemos ejercer sobre el tono.

La situación de manipular la tinta “sobre la marcha” es muy común en la impresión flexográfica. El proveedor de tinta tiene las hojas de especificación de cada una de sus tintas, de los diluyentes/espesantes correctos y su proporción de uso, acelerantes/retardantes de secado, etc.

Si bien la manipulación “sobre la marcha” nos puede salir bien, tendremos un problema cuando debamos repetir el trabajo en cuestión, debido a que no tenemos medidos los efectos de la manipulación efectuada la primera vez.

El método científico de prueba y error es muy, pero muy caro en nuestra industria.

En la próxima entrega tendremos una charla con un fabricante de tintas y ampliaremos los puntos anteriores.

Nos vemos!!

Citas: el concepto de “escalera” fue tomado del curso on-line de Terminación y Troquelado de la Cámara de Fabricantes de Cartón Corrugado, dictado por el Ing. Guillermo Mistrorigo, Octubre 2020. 

Video: gentileza de Mark Andy Inc.

Ilustraciones: tomadas de banco de fotos

La impresión flexo, ¡qué fácil! (y qué difícil)

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Cualquiera de nosotros que haya visto una impresora flexografica entiende al instante el sistema de impresión. Básicamente porque vemos una plancha de polímero con relieve tocar suavemente un cilindro que transporta tinta para, inmediatamente después, transferir esa imagen “entintada” al papel. Esta sería la parte sencilla del proceso, ahora bien, entender cómo se produce esa transferencia es un poco más complicado.

Para ello tenemos que analizar el comportamiento de la tinta (un líquido) el cilindro que transporta esa tinta (anilox) y el polímero que recibe la tinta y la transfiere al papel.

Tenemos que considerar los siguientes puntos:

1. Tensión y energía superficial de:
• Tintas
• Cilindros anilox
• Polímero
• Sustrato

2. Cilindros anilox
• Material de construcción
• Angulo de grabado
• Lineatura
• Volumen

3. Polímeros
• Diferentes métodos de tramado.
• Relación de tramado del polímero con la lineatura del anilox.
• Sistemas de montaje de polímeros y cintas doble faz.

 

4. Tensión de banda de impresión en una impresora de cuerpos en línea

• En máquinas Flexo mecánicas.
• En máquinas Flexo con tecnología Servo

5. Intensidad de color
• Relación con la velocidad de la maquina
• Relación con la lineatura y volumen del cilindro Anilox
• Métodos para lograr el tono del color.
• Espacio de color de una maquina
• Formulación de tintas

En las próximas entregas desarrollaremos cada uno de estos puntos con la ayuda de colegas involucrados en los distintos aspectos de la impresión flexografica.

Tecnología RFID, Etiquetas Innovadoras y los Comercios del Futuro

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Imagínense esto: automatización en el comercio minorista. Locales sin personal. Sin colas ni cajeros, sólo smart phones. Los clientes pueden comprar mayormente alimentos, pero también artículos de limpieza y cosméticos. Bebidas de todo tipo, caramelos, snacks, comidas pre-preparadas, lácteos refrigerados y hasta salchichas están fácilmente disponibles. Y cada producto está marcado con una etiqueta RFID especial, lo que permite esta realidad futurista: un proceso de venta automatizado.

“Esto no es ciencia ficción, es una tienda existente en nuestro país, Polonia, con tiendas adicionales que se preparan para hacer lo mismo y abrir también”, dice Lukasz Chruslinski, Gerente de Ventas Mark Andy. Al monitorear los flujos y reflujos de las tendencias de impresión en todo el mundo, Mark Andy ha notado un aumento en la demanda de máquinas de impresión con módulos RFID. Un giro en la principal aplicación de RFID existente ha causado sensación en el mundo de los envases y las etiquetas. Chruslinski continúa: “Muchos se preguntan ‘¿qué sigue?’ En la industria de la impresión, y dado que el crecimiento de la CAGR (nota de t: Tasa Compuesta de Crecimiento Anual) se mantiene estable, las etiquetas RFID son sin duda una de las muchas vías que nuestros socios tecnológicos y clientes están explorando” 

Si bien la tecnología no es nueva, el uso de RFID (identificación por radiofrecuencia), en nuestro día a día, sigue creciendo. Por ejemplo, varias industrias, desde lavanderías hasta hoteles y, por supuesto, almacenes, han estado utilizando etiquetas RFID durante años. “RFID permite leer y enviar datos, así como la carga electrónica de chips que contienen estos datos”, explica Lukasz Chruslinski. Continúa: “Estos usos tradicionales todavía prevalecen y continúan brindando a los usuarios finales información y control adicionales de sus procesos industriales, fabricación, logística, almacenamiento, control de acceso, gestión de seguridad y más”.

Donde las tendencias están evolucionando es en la implementación de la tecnología RFID en el siguiente nivel de uso con respecto a la automatización. Refiriéndose a su experiencia personal y profesional, Chruslinski continúa compartiendo que algunas tiendas en Polonia, incluída una popular cadena de deportes, ya han utilizado con éxito esta tecnología para convertirse en una “tienda inteligente”. Las etiquetas RFID permiten a los clientes realizar compras de autoservicio, reduciendo el tiempo del proceso de compra y brindando beneficios económicos para las tiendas minoristas, a través de la gestión de inventario (un uso tradicional de RFID), así como reduciendo el número de empleados necesarios (una nueva tendencia encontrada a través de etiquetas RFID). “Todo el proceso es muy simple: una etiqueta RFID (que contiene información sobre un producto) se mueve a un lector y un sistema se encarga del resto”, dice Chruslinski. Sin embargo, las oportunidades que brinda esta tecnología son mucho mayores. “El enfoque puede ser mucho más creativo”, continúa Chruslinski.

“El mejor ejemplo es el uso de RFID en probadores. Por un lado, esta solución proporciona un valor conocido al disminuir la probabilidad de que un producto sea robado. Pero algo más nuevo para lo que vemos que se utilizan las etiquetas RFID, es para proporcionar al usuario final, o al consumidor, más información sobre el producto. ¿Qué significa ésto exactamente? ¿Y cómo funciona? Los lectores de RFID son cada vez más accesibles. Los consumidores escanean la etiqueta RFID y después de obtener los datos, los lectores brindan información adicional en una pantalla especial, incluidas sus propiedades, versiones, colores, tamaños o precios. Además, también permiten una mejor experiencia de usuario al proporcionar ideas para usar un producto dado en diferentes maneras. También se ha demostrado que estas propiedades de UX (nota de t: experiencia del usuario) generan ingresos adicionales para los minoristas al incorporar otros productos de la misma tienda en sus recomendaciones. En última instancia, las etiquetas RFID tienen la capacidad de ayudar a los clientes a convertirse en ventas al mismo tiempo que aumentan el monto promedio de compra por cliente “.

La tecnología RFID también se utiliza cada vez más en las tiendas de comestibles. “En Polonia, algunos de ellos lo están probando actualmente”, dice Lukasz Chruslinski. Continúa: “Por ejemplo, cuando un cliente ingresa a la tienda con una lista de productos” perdidos “en su teléfono inteligente (enviado por un frigorífico “inteligente”), los datos se leen sin contacto y un sistema resume y procesa las compras. Así es como se verá el mundo en un futuro cercano y las empresas preparadas para estos cambios serán las
ganadoras ”. 

También afecta a los productores de etiquetas. Las etiquetas RFID, también conocidas como transponders o chips, son pequeños soportes de datos, producidos en diferentes formas y tamaños. Contienen información que necesitan los fabricantes, adaptada a las expectativas de los usuarios. “Toda esta información se colocará en la etiqueta del futuro”, agrega Chruslinski, “Mark Andy ofrece prensas que permiten la producción de tales etiquetas, utilizando banda angosta con etiquetas RFID, lo que abre oportunidades completamente nuevas para los convertidores.

Pueden usarse para brindar información sobre un producto comprado al cliente: un manual, fecha de vencimiento, propiedad actual y muchos más. Protegerá del robo y la falsificación. También nos traerá la información de “consumir antes de” (en el caso de productos almacenados en nevera) o una garantía para un producto que compramos ”.

La tecnología RFID también se utiliza en la industria farmacéutica. “Cada año se retiran del mercado cientos de medicamentos. La mayoría de
estos retiros anunciados obligan a una tienda médica que tiene estos medicamentos (por ejemplo, la farmacia de un hospital) a realizar algunas acciones. Debe especificar si utilizará el medicamento o no. Si no es así, el medicamento debe localizarse y retirarse para asegurarse de que no se venda ni se dosifique a ningún paciente ”, explica Chruslinski. Se deben iniciar acciones similares en el caso de productos con fecha de vencimiento de uso. Gracias a la tecnología RFID, sacarlos del mercado es muy sencillo y mucho más rápido. Reduce los procesos manuales, la cantidad de trabajo necesario para algunas acciones, ayuda a eliminar errores en conjuntos, influyendo positivamente en la seguridad de los pacientes y los clientes de farmacia. Por lo tanto, esta solución prevalecerá mucho más en nuestra vida en un futuro no muy lejano.

Como subraya Mark Andy, un almacén moderno ya no podrá funcionar sin este tipo de información, entregada como códigos de barras o etiquetas. Las tecnologías de identificación ayudan a completar y obtener los productos más rápidamente. Además, se garantiza una perfecta distribución. Gracias a RFID, acortamos el tiempo de implementación de nuevos empleados, y la mercadería se colocará más cerca de un lugar de emisión. Si la cadena de suministro está configurada correctamente, también podemos reducir el espacio de almacenamiento.

“Los proveedores de paquetería también utilizan la tecnología RFID, por ejemplo, al clasificarlos”, termina Chruslinski. Completa su pronóstico compartiendo “Permite una identificación sin contacto de cartas y paquetes desde varios metros, acelerando el proceso de trabajo y haciéndolo más fácil”. Esta solución entra ampliamente en muchas áreas de nuestra vida y se vuelve cada vez más popular. Por eso, invitamos cordialmente a los impresores y a todas las demás empresas interesadas en esta tecnología a que se pongan en contacto con nosotros. Estaremos encantados de compartir nuestros conocimientos y experiencias con ellos ”, concluye Lukasz Chruslinski.

 

Sobre la Autora de esta nota

Lena Chmielewska es la Gerenta de Marketing de Mark Andy Europa. Está enfocada en encontrar soluciones que brinden éxito entre los clientes de etiquetas . Con una amplia experiencia en impresión flexográfica y fabricación de planchas, conoce los mercados de etiquetas, embalajes y corrugado y comprende las demandas en constante evolución.

    Traducción de: Germán Calvo – gcalvo@digitalyflexo.com